En las tierras de Myrdhan, Haradon y Awrahell viven, en tiempos de guerra, nuestros tres protagonistas; Alasar, Revyn y Ardhes. Un joven myrdhano que lo pierde todo a causa de esta guerra. Un joven haradono que ya lo ha perdido todo a causa de la misma guerra. Una joven princesa de Awrahell, lo tiene todo, menos la felicidad. Ellos tres serán la clave para resolver el conflicto entre estos reinos. Ellos cambiarán el mundo, los ahirah, hijos de Ahiris.
-El mundo está compuesto por millones y millones de almas, de seres y esencias, pero a veces, en determinados momentos de inflexión temporal, unos pocos héroes o villanos determinan el futuro del resto con sus actos. Estos héroes y villanos en mi idioma reciben el nombre de ahirah, que significa «los hijos e hijas de Ahiris». Pueden ser buenos o malos como la vida misma, pero en su interior encierran poderes divinos.
Alasar, el myrdhano, pierde todo lo que él conocía como vida por culpa de la guerra. Su pueblo es arrasado por el ejército de Haradon (como el resto de Myrdhan) y decide irse a vivir a unas cuevas con el resto de los niños sobrevivientes a la masacre, nada de adultos, sólo ellos. Vivirán allí durante nueve años. Se hacen fuertes, ya no son tan niños, pero siempre serán Los niños de las Cuevas. Vivirán en relativa paz durante todo ese tiempo, pero Alasar tiene sed de venganza.
Revyn tampoco es simpatizante de la guerra, aunque él sea haradono. Ha perdido a toda su familia y tampoco es feliz. Vive día a día, de lo que su trabajo en un establo, pero para dragones. Tiene una capacidad innata para apaciguarlos. Pero las cosas se tuercen y decide irse con el ejército haradono, a pesar de su poca simpatía por ellos.
Ardhes es la princesa de Awrahell, hija de una humana y un elfo, los cuales son perseguidos por los humanos, está destinada a ser la conciliadora de las dos razas a las que pertenece. Un día descubre una faceta más de su fría madre y decide hablar con su padre, un elfo aficionado a dormir en un balcón. Durante nueve años su relación se estrecha y ella tiene claro, por las profecías que ve con su padre, que será la conciliadora.
Nueve años más tarde, la guerra vuelve a estallar. Las profecías dicen que una raza se extinguirá por causa de esta guerra. ¿Humanos, elfos o dragones? Tres jóvenes serán la clave para que pase. Aunque uno de ellos será el detonante, el que todas las profecías apuntan.
Los hijos de Ahiris es un libro de fantasía épica juvenil, con puntos un poco duros para ser juvenil y con una trama muy bien pensada. Giros en la historia muy inesperados y personajes creíbles. Además de romance inesperado en tiempos de guerra. Sin embargo, no todo son cosas buenas. En ocasiones el ritmo flojea y se hace un poco pesado, sinceramente, se podría haber recortado algunas páginas hacia la última mitad de la novela. De todos modos, a todos los amantes de la fantasía fantástica juvenil, se lo recomiendo encarecidamente.
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